El arranque del partido fue todo para Argentina, que entró
al mismo mucho más concentrado que su rival. Entre Scola y Delía adelantaron al
equipo por 6-0, y más tarde, cinco puntos seguidos de Nocioni dejaron la
historia 11-0. Venezuela estaba estático en ofensiva y con una eficacia muy baja. Para cambiar esto, el entrenador Nestor García realizaba
todo tipo de modificaciones: desde tiempos muertos, a varios cambios de nombres
y hasta en la táctica defensiva. La albiceleste se sentía cómoda en el juego,
guiada por un Campazzo determinante con cinco asistencias en los primeros ataques
del equipo. Sin embargo, esa superioridad que se vio durante buena parte del
primer cuarto, la Selección Argentina no terminó de mostrarla en el marcador.
En los minutos finales cayó en varias desconcentraciones y con un triple
agónico de Graterol, Venezuela terminó este primer cuarto con un marcador de
20-13. Argentina iba a pagar caro el no apretar el acelerador en el
momento indicado, sufriendo un segundo cuarto muy flojo, tal cual sucedió en el
anterior encuentro ante México. El aro se cerró por completo pero también
desaparecieron las ideas y la fluidez en ataque. Venezuela le sacó provecho a
esto y con un rápido 0-6 se puso a uno. Los de Sergio Hernández estuvieron
cerca de siete minutos sin anotar tiros de campo y apenas con dos libres de
Laprovittola como su única anotación. El único que se mostraba intenso y
efectivo era Delía, agresivo en el poste bajo y más involucrado en ataque que
en otras ocasiones. De todas maneras, la mejoría venezolana continuó y de la
mano de un buen tramo de Graterol y Cox, pudieron empatar el marcador. El mal
momento argentino continuó más tiempo y con dos libres de Cubillán, la
Vinotinto se fue al descanso con un marcador de 30-28.
Tras la reanudación, poco cambió la selección
albiceleste y el equipo seguía perdido en ataque. Ya no sólo no encontraba
variedad en sus opciones, sino que tampoco tenía resultados en el siempre
seguro Scola, bien controlado por Marriaga.Pero el aro no podía permanecer
cerrado durante tanto tiempo y de a poco se fue abriendo. Laprovittola fue el
primero que sumó con un triple y luego lo acompañaron Safar y Nocioni, para dar
vuelta el marcador y poner a los de
Sergio Hernández tres puntos arriba.Además, los venezolanos se cargaron
demasiado rápido de faltas, facilitándole a Argentina puntos fáciles desde la
línea (aunque los porcentajes desde allí eran flojos). De todas maneras y como
fue una marca registrada en todo el torneo, Venezuela cerró con un par de
triples (Guillent y Lewis) para recortar ventaja con su oponente y llegar al
final del tercer cuarto con un resultado que dejaba esperanzas de poder lograr
el triunfo (52-49). En el último período,el ímpetu ahora estaba de Venezuela y
la Vinotinto se mostraba más intensa en ambos lados del campo. Argentina cayó
en una racha demasiado prolongada de balones perdidos y entre las ganas de
Colmenares y el talento de Guillent, los del venzolanos pasaron a ganar por
cinco. Argentina venía extrañando la mejor cara de Campazzo, quien luego de ese
buen inicio se había desdibujado. Ya sin margen de error, el base del Real
Madrid consiguió sus primeros puntos y con varias penetraciones, dejó a la
albiceleste uno abajo. El problema fue que la selección Argentina volvió a
fallar en defensa: Graterol anotó un doble sin resistencia y en la siguiente
jugada, José Vargas una bandeja tras robo que empezó a definir la historia. Una
jugada de 2+1 de parte de Nocioni le puso suspenso a la definición y de hecho,
Argentina tuvo un par de lanzamientos para empatar el partido. El primero fue
del propio Nocioni, pero su disparo externo no entró y Venezuela sumó desde la
línea de personal. Tras una penetración rápida de Campazzo para bajar a 2 la
diferencia, Gregory Vargas tuvo en sus manos el triunfo con un par de tiros
libres libres. Sin embargo, esta vez falló el primero, para dejarle una
posibilidad a Argentina, que estaba abajo por tres con siete segundos para la
conclusión final. El balón fue a manos de Laprovittola, quien llegó a campo
contrario exigido y tomó un disparo muy forzado que no estuvo cerca de entrar;
Venezuela aseguró el rebote y desde la línea de tiros libres puso el resultado
final para conseguir el triunfo, hacer historia y lograr una
plaza fija para los próximos Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016.
La medalla de bronce fue para Canadá que derrotó a México por 87-86 en el partido correspondiente al tercer y cuarto puesto del torneo.
El máximo anotador del FIBA Américas ha sido el argentino Luis Scola con 211 puntos (21.1 por partido), el máximo reboteador ha sido el mexicano Gustavo Ayón con 124 (12.4 por partido) y el mejor asistente ha sido el argentino Facundo Campazzo con 59 asistencias (5.9 por partido).
El quinteto ideal del torneo lo forman: Gustavo Ayón (México), Andrés Nocioni (Argentina), Andrew Wiggins (Canadá), Heissler Guillent (Venezuela) y Luis Scola (Argentina).
En Twitter: @Danielbm200
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